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EL GUATEQUE. «Nessuno mi può giudicare» (Ninguno me puede juzgar) se estrenó en San Remo y fue interpretada por Caterina Caselli
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28 JUN 2021 - 08:48
La memoria musical y la alegría de los sesenta. Los domingos, de 22 a 23h, con Angel H. Sopena. Los 4 de La Torre fueron de los primero en importar el ska

El lunes empezó el verano, esa época del año que suele estar muy bien porque hace buen tiempo y tienes vacaciones. «Do It Again» es una canción escrita por Brian Wilson y Mike Love, grabada por el grupo estadounidense The Beach Boys. Es el segundo sencillo publicado en 1968, su último título de la década de 1960.

Una monja belga, con sobrenombre curioso, 'Soeur Sourire' (hermana sonrisa), y una guitarra, desafía la electricidad del rock naciente y se convierte en el único artista belga que haya liderado el 'hit parade' norteamericano. Y durante semanas. Y por delante de Elvis Presley. , “A dos niñas”, con deliciosas armonías vocales, dejes de canción de autor afrancesada en la introducción, melodía rota por el rokero y demoledor riff de guitarra eléctrica que anuncia el estribillo, apuntes flamencos como puente en la segunda parte y un final de brotes psicodélicos. Todo ello en una sola canción. Canción que, se supone, escribieron Juan y Junior pensando en sus novias de la época, Marisol y Rocío Dúrcal. Los Íberos es otro de los grupos fundamentales de la década de los 60 en España. Su material no fue muy abundante para el largo período que estuvieron activos (nueve sencillos y un LP en unos doce años) por multitud de factores, pero algunas de sus canciones se encuentran entre las imprescindibles y, aunque ya queda muy lejano, aún hay quien les recuerda por ser uno de los mejores en directo de entonces. "Legata A Un Granello De Sabbia" le llevó a Nico Fidenco a ser conocido a nivel global, es el primer single que supera en Italia el millón de copias, Italia era entonces una auténtica potencia musical al gusto europeo. A mediados de los sesenta, el rítmo del ska era vilipendiado por los medios musicales de nuestro país por considerarlo machacón, repetitivo y poco sofisticado. Reconocían, eso sí, que "tiene lo necesario para hacerse popular" entre la chavalería, siempre dispuesta a aprender nuevos pasos de baile con los que impresionar a sus conquistas. Los 4 de La Torre fueron de los primero en importarlo. En las antípodas (catalanas) se encontraban Los Telstars. Bautizados en honor al célebre instrumental de The Tornados, el cuarteto se definía por su insultante juventud y un apego melódico por la música surf. En pareja sintonía con la moda del yeyé, surgieron los primeros atisbos de mestizaje antillano en las canciones veraniegas de turno. En un registro cercano al de su Maria Isabel, Los Payos se atrevieron con los sones tradicionales, dispuestos a enmendarle la plana al mismísimo Harry Belafonte . Thomas William Standen, conocido artísticamente como Terry Winter fue un compositor y cantante brasileño. Tuvo un par de éxitos, "Summer Holiday" (Fiesta de verano) y "You'll notice me" (Te hablarán de mí), que en la década de los 1970 le posicionaron en un lugar importante en listas de popularidad latinoamericanas.

Un tema, éste de origen francés, que fue muy conocido en su momento es “L´école est fini” de la ye yé francesa Sheila. También conoció montón de versiones, pero ninguna tan alegre como la de Rosalía, que se inicia con el toque de campana que señala el fin de las clases y el inicio del desparrame festivo. Al llegar el verano, se producía un curioso fenómeno dentro del mundo del disco: aparecían esas canciones agradables y pegadizas, aptas para ser tatareadas y escuchadas bajo el sol de agosto en una playa de cualquier costa española. El verano era el momento de Luis Aguilé;

Fórmula V y su primer disco se presentan en Madrid el 9 de enero de 1968. El fracaso es rotundo. A la carísima producción y promoción, el público responde comprando apenas unos cientos de discos. El grupo está a punto de separarse. A Edoardo Vianello, antante y actor italiano nacido en Roma hace 83 años se le considera uno de los cantantes italianos más populares de los años 1960. «Nessuno mi può giudicare» (Ninguno me puede juzgar) se estrenó en la decimosexta edición del Festival de la Canción de San Remo y fue interpretada por Caterina Caselli y Gene Pitney, terminando en segundo lugar. En julio de 2000 la canción se convirtió en el himno del primer WorldPride celebrado en Roma


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