TARDE ABIERTA. "El problema de las ayudas ya no es la cuantía sino la tardanza"
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Pedro Alarcón es presidente de la Asociación de Discotecas de la Región y Manuel Iniesta el propietario de El Refugio, local integrado en Hostemur.
Bares de copas y discotecas llevan más de 15 meses cerrados, al igual que las salas de conciertos, que no son consideradas como espacios culturales sino como ocio nocturno. Estos establecimientos, alrededor de 500, se enfrentan sin embargo al pago de los alquileres de sus locales o a los ERTE, pudiendo provocar el cierre de muchos de ellos, pero será algo que no se haga visible hasta que, una vez que se vuelva a la normalidad, permanezcan cerrados.
REDACCIÓN.
De los efectos de la pandemia sobre la hostelería, y más concretamente sobre los locales de ocio nocturno, ha charlado esta tarde nuestro compañero Jacinto Nicolás con el presidente de la Asociación de Discotecas, Pedro Alarcón, y el propietario de un conocido bar de copas de la capital, El Refugio, Manu Iniesta. Ambos coinciden en que el mantenimiento del cierre de estos establecimientos ya ha condenado a muchos de ellos a echar la persiana de manera definitiva.
Se quejan de que las medidas implantadas para el control de la enfermedad se han guiado por un criterio "medieval" y de que las autoridades han mostrado muy poca imaginación. Denuncian también la escasez y, sobre todo, la tardanza de las ayudas económicas. Ayudas, decía Manu Iniesta, que no son tantas como la administración pretende aparentar, porque el mismo paquete (que casi siempre procede de fondos del gobierno central) ha sido anunciado hasta en tres ocasiones distintas.
Tanto Iniesta como Alarcón coinciden en que no hay razones para no permitir en los locales de ocio lo que ya se consiente en otros establecimientos. Y, sobre todo, insisten en que el verdadero problema de los contagios se ha producido en entornos privados, en reuniones familiares o con amigos en domicilios particulares. Porque en los bares, según Iniesta, como en cualquier otro lugar en donde haya alguien encargado de vigilar, se puede garantizar que las normas se cumplen.
