Un gol de Pedro León acerca a los grana a la zona de 'play off' de ascenso a Segunda División.
GREGORIO LEÓN
Primero Pedro León. Luego, un ejercicio de supervivencia. Y el Real Murcia se llevó todo el botín del Nuevo Colombino para no desengancharse del 'play off'. Pablo Alfaro, por fin, sonríe. El zaragozano tuvo que esperar a la cuarta jornada para vivir la victoria. El discurso más templado y optimista queda vacío si no se ve refrendado con resultados. Y el de Huelva reafirma al nuevo Murcia de Alfaro en sus convicciones. El espíritu mosquetero y el oficio explican en no escasa medida este triunfo que alumbra excitantes posibilidades futuras.
La primera media hora fue de atonía. Los dos equipos, mortecinos, no ofrecieron nada ofensivamente. Hasta que una acción por la parte izquierda permitió que un balón llegara a Pedro León al borde del área. Y ahí el muleño, es infalible. Congeló el tiempo. Meditó. Y golpeó al ángulo imposible de Rubén Gálvez. El muleño, apareciendo de nuevo en zona de remate, pudo firmar el 0-2. Pero otro balón procedente del sector izquierdo le cayó a su pierna mala.
Viró la segunda mitad. El Recreativo, acicateado por el marcador en contra, impuso la posesión de la pelota, exigiendo a un sobreesfuerzo a la defensa murcianista. Para complicar aún más la situación, fueron cayendo unidades. Marcos Mauro hubo de retirarse, lesionado. Larrea y Pedro León, exhaustos, también fueron relevados. A partir de ahí, el esfuerzo mancomunado, el alto sentido del deber, permitió conservar el tesoro del gol y llevarse los tres puntos del Nuevo Colombino.
