El Real Murcia sigue inmolándose en Nueva Condomina

El Real Murcia sigue encallado en Nueva Condomina. Si ante el Córdoba cayó víctima de sus errores defensivos, la película ante el Sanluqueño fue aún más dramática. La entidad del rival era inferior, y el margen de maniobra mayor. Y ni con esas. Tres regalos y tres goles del conjunto andaluz. El equipo de Gustavo Munúa se presentará en la cuarta jornada, ante un rival directo como el Ibiza, con apenas tres puntos y tras firmar un 2-3 con el Sanluqueño. Encima, con la baja de Marc Baró, que hizo un mal partido y que además vio la tarjeta roja.

Álex Guti y Mwepu sentenciaron al Real Murcia. El carrilero derecho generó peligro continuamente y de sus botas salió la asistencia para que Airam Cabrera batiera en el área a Manu García a los 20 minutos tras un desajuste en el costado izquierdo. Así se llegó al descanso, generando además muy poco con un par de lances de Montoro y Carrillo. El delantero murciano firmó el empate, con un buen disparo tras el descanso, nada más reanudarse el choque. Nueva Condomina se emocionaba, pero en cuestión de segundos, otro agujero por el flanco zurdo local y la asistencia de Álex Guti para Viti. Poco duraba la alegría. Con los cambios, y la necesidad, el Real Murcia apretaba más.

Una triangulación de Pedro León con el recién incorporado Rodri Ríos suponía el empate gracias a una bella vaselina del punta (2-2) en el 65'. Había tiempo, pero para otro fallo más. Contragolpe, roja a Marc Baró, superado por Mwepu, y en la acción siguiente, una falta en la frontal acababa con gol del propio Mwepu tras una triangulación en la que Coke le asistía, sin ningún defensor del Real Murcia pendiente del visitante. Ni con uno menos y el marcador en contra se vislumbró reacción. Sin ideas y sin apenas peligro, el equipo de Gustavo Munúa hincó la rodilla víctima de sus propios errores defensivos.