El sanjaviereño batió en Corea, epicentro de este deporte, a Dong Koong Kang por 5-4 en la final más larga y con mayor dotación económica de la historia del circuito. Zapata hizo 12 carambolas seguidas en el set decisivo
JOSÉ A. VERA
Juan David Zapata se proclamó campeón del SK World Championship de billar a tres bandas tras derrotar en la final a Dong Koong Kang por 5-4 en lo que supuso el partido más largo en la vida de esta modalidad. El billarista de San Javier, que arrancaba el torneo más prestigioso celebrado hasta la fecha en el circuito PBA como número 25 del mundo en el ranking, fue superando rondas con solidez hasta el último encuentro frente a uno de los grandes referentes coreanos. El choque se disputaba en Seúl, epicentro de este deporte desde hace unos años y donde Zapata también compite como estrella foránea en el torneo nacional por equipos.
El sanjaviereño es el tercer español que se impone en un SK World Championship tras David Sánchez y Javier Palazón, pero nunca se había logrado una gesta similar en el territorio de los grandes especialistas coreanos. Zapata se embolsará unos 225.000 euros al llevarse el torneo con mayor dotación económica de la historia de este deporte.
Zapata arrancó fuerte, pero Kang le remontó la primera manga. Del sanjaviereño fueron la segunda (con solidez) y la tercera, tras aprovechar varios errores de Kang a falta del punto final. El coreano igualó el partido en la cuarta y Zapata respondió de nuevo en el quinto set. Con el 3-2, el billarista local volvía a poner las tablas. La séptima manga sería decisiva psicológicamente, Zapata se la llevó y eso trasladaba a Kang la presión en la octava. Con el choque igualado a cuatro sets, Juan David tenía el saque en la novena y última partida. De forma espectacular, encadenó 12 carambolas en el primer turno, algo que Kang no pudo soportar, quedándose en cuatro. Zapata, en una nube y arropado por su entorno y su pareja (María Camila Ochoa) gracias a la pantalla gigante del recinto, remató la final con tres carambolas más para el 15-4 en el último juego de una final histórica que tuvo a un joven de San Javier como protagonista.
