El presidente del Murcia y el exdueño del Leganés sellan el pacto de colaboración para reforzar económicamente al Real Murcia y establecen una hoja de ruta de trabajo conjunto.
GREGORIO LEÓN
Agustín Ramos y Felipe Moreno están en plena sintonía. Esa frase resume el estado de la relación que mantienen el presidente del Real Murcia y el expresidente del Leganés, después de varios contactos. El último se ha producido este miércoles, concretado en una comida celebrada en la playa, con un clima de complicidad. No es fácil que dos empresarios de tal calibre se pongan de acuerdo. Pero Ramos y Moreno están utilizando el mismo idioma: dar vigor a las finanzas del Real Murcia, para elevarlo al fútbol profesional.
Felipe Moreno, quien ya celebró el martes un contacto con otro miembro significado del equipo ejecutivo grana para tomar conciencia real de las cuentas económicas del Real Murcia, se ha reunido hoy con el presidente grana, después de volver de Brasil, donde tiene negocios inmobiliarios. Ramos y el exdueño del Leganés han trazado una hoja de ruta en la que la palabra Hacienda aparece en letras mayúsculas. Moreno considera que los intereses que paga el Murcia por culpa de sus deuda pública, cercanos al millón de euros anuales, actúan de freno a la entidad. Y debe ser el primer asunto a resolver. Ese es el mismo pensamiento de Agustín Ramos, quien no se ve capacitado, en solitario, para alcanzar un acuerdo singular con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social. Pero la incorporación de Felipe Moreno, con sus posibilidades económicas y experiencia, haría más factible ese acuerdo tantos años postergado. El empresario cordobés quiere mantener reuniones la primera semana de septiembre, cuando regrese la plena actividad administrativa, con responsables de Hacienda y Seguridad Social.
Felipe Moreno, en conversación con Onda Regional, ha querido dejar claro que "no voy a traicionar a Agustín Ramos, y voy a trabajar conjuntamente con él". De esa forma se ha apresurado a atajar de forma taxativa especulaciones sobre posibles alianzas con otros accionistas de la entidad, que cuestionan la gestión del abaranero y la toma de algunas decisiones.
Levantar el concurso de acreedores
Hay otro punto en el que rápidamente Felipe Moreno también se ha alineado con el presidente del Real Murcia: la exigencia de conseguir cuanto antes el auto de cumplimiento de convenio. Para ello es preciso aportar una cantidad que bordea los 500.000 euros. Agustín Ramos quería abonar esa cifra y formular la petición formal antes de que se paralizaran los juzgados, pero la necesidad de atender otros pagos más apremiantes, como la presentación del aval de 100.000 euros para que el Murcia fuera inscrito en la Primera RFEF, han aplazado esa idea, que será retomada en septiembre.
Arnau Solà, cedido por el Almería
El Real Murcia va a completar su defensa con la incorporación de Arnau Solà, según información adelantada por la Cadena SER. Lateral izquierdo internacional sub-19, resolvió su contrato con el Barcelona, tras militar siete temporadas en el club catalán, y ha sido contratado por el Almería hasta 2027. La entidad andaluza lo cede ahora al Murcia.
Armando se queda
La Comisión Deportiva se afana en crear huecos en la plantilla. Y ya le ha comunicado a Fran García y Dani García que no entra en los planes del curso 2022/23. Sin embargo, el capitán Armando se queda. El presidente Agustín Ramos, a consecuencia de las conjeturas de la última semana, quiso tranquilizarlo, y le aseguró el viernes de la semana pasada que seguiría en el Real Murcia.
Hacienda, pendiente de Víctor Meseguer
El traspaso de Víctor Meseguer al Granada, por una cantidad que va a rondar el 1'5 millón de euros, concede unos beneficios económicos al Real Murcia: un 20 por 100 para el club grana. Pero la Agencia Tributaria tiene un derecho prevalente para quedarse con esa cifra, que ingresará Hacienda para rebajar la deuda global que tiene contraída con esta entidad el Real Murcia.
