El mentor deportivo y exfutbolista del FC Cartagena prefiere pensar "solo en objetivos a corto plazo, como el final de la primera vuelta, pero no más allá porque nadie asciende en Navidad"
El FC Cartagena luce fútbol y espíritu. Así ha conseguido consolidarse en las posiciones de playoff de ascenso a Primera División. Los de Luis Carrión exhibieron buen juego y una fe inquebrantable para remontar al Eibar el pasado fin de semana. El trabajo mental da sus frutos y en esa parcela trabaja esta temporada en el club cartagenero Alberto De la Bella, que se retiró el pasado verano tras vestir la elástica albinegra.
De La Bella reconoce que el triunfo del pasado fin de semana "es una inyección de moral fuerte, el golazo de Ortuño hizo que el equipo ganara y es reconfortante que lo que se trabaja durante la semana dé sus frutos". El catalán está muy contento: "Disfruto de la plantilla en el día a día, es un grupo muy comprometido, cada uno tiene sus objetivos individuales y también hacemos dinámicas de grupo, está bien que se conozcan porque cuando sufren o ganan lo hacen juntos". De La Bella cree que puede "transmitir ciertas cosas a los futbolistas, puedo ser útil porque los jugadores pueden verse reflejados en mí". Y elogia a Luis Carrión: "Ha sido una persona muy accesible, deja hacer, me permite estar muy cerca de los jugadores, las conversaciones con los futbolistas son privadas e intento ayudarles para que estén en sintonía con lo que ellos quieren y el equipo necesita".
