El equipo murciano apuesta por volver a sus orígenes, con un proyecto de cantera, y renuncia por motivos económicos a hacer efectivo su ascenso a Segunda e incluso también a la plaza que le correspondería en Segunda B
El Imperial Club Deportivo de Fútbol Sala no jugará finalmente en Segunda División, pese a lograr recientemente un ascenso a dicha competición. Su filial, al mismo tiempo, había dado el salto a Segunda B... y ninguno de ellos se hará efectivo. Francisco Muñoz, presidente de la entidad, confirmaba en Onda Regional que "aunque se confirmará este lunes la decisión final, todo indica que saldremos en Tercera División. Habíamos llegado a un punto insostenible, tras tanto crecimiento e inversión económica. Y una vez que no podemos cubrir el presupuesto necesario lo mejor es que esto sea un punto de inflexión y empezar desde abajo".
Tanto es así que el filial desaparece, quedará sólo un equipo "basado en los jugadores jóvenes que tan bien lo hicieron en el filial, y también en chicos salidos de la cantera de Paulo Roberto". Sólo quedará una escuadra, que también renuncia a jugar en Segunda B, "preferimos empezar en Tercera y que volvamos a ser lo que éramos inicialmente" explica Muñoz. El club, con gran apoyo económico creció con un presupuesto de 130.000 euros el año pasado, y para esta temporada necesitaba el doble. "No queremos hipotecar el club, es el momento de frenar", concluía el presidente.
