El grupo estaba liderado por un peligroso individuo que tenía en vigor tres órdenes de ingreso en prisión, por lo que para su detención se requirió la intervención de los Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES)
REDACCIÓN
Según las investigaciones policiales, varios miembros se encargaban de realizar vigilancias y seguimientos de sus objetivos llegando a recopilar gran cantidad de información acerca de sus víctimas como domicilios, vehículos con lo que se movían o los horarios de trabajo. Los potenciales objetivos de la organización se centraban principalmente en entidades bancarias, establecimientos o empresarios de los que pudieran obtener notables beneficios económicos.
Otros componentes de la organización se encargaban de alquilar los vehículos que posteriormente emplearían los atracadores para realizar los robos, o proporcionaban sus tarjetas de crédito para pagar los distintos servicios que necesitaba la organización
Con esta operación se han esclarecido, entre otros, tres robos con fuerza en Jumilla y Fortuna (Murcia), así como la sustracción de una motocicleta también en esta ciudad.
De los once detenidos -dos mujeres y nueve varones de distintas nacionalidades- cuatro han sido ingresados en prisión