El ayuntamiento cifra en más de 200.000 euros los daños provocados por la lluvia en infraestructuras municipales
PACO GÓMEZ. Lorca
El alcalde de Lorca, Diego José Mateos, reconoce que las obras que hay que llevar a cabo en la pedanía de Campillo para poder evacuar las aguas que se acumulan, cada vez que se producen fuertes precipitaciones, no estarán exentas de dificultades y polémica con los vecinos afectados, como consecuencia del proceso de expropiaciones que hay que llevar a cabo.
A pesar de ello, el primer edil se muestra convencido de que se trata de un proyecto necesario que hay que ejecutar cuanto antes y que ya cuenta para ello con el consenso de las administraciones local, autonómica y central.
Mateos, ha cifrado en más de 200.000 euros los gastos derivados de las obras de emergencia que tuvo que realizar el ayuntamiento como consecuencia de los daños causados por la gota fría en infraestructuras municipales.
El alcalde ha indicado que los trabajos estuvieron relacionados con la apertura de caminos y los achiques de agua, además de la construcción de la zanja que está sirviendo para evacuar el agua que anegó el paraje de El Saladar, en la pedanía de Campillo, donde la crecida alcanzó un metro de altura.
El Gobierno central aportará el 50 por ciento del dinero de esos daños, el ayuntamiento de Lorca considera que la Comunidad de Murcia debe "hacer un esfuerzo" y asumir al menos un 25 por ciento del dinero. El consistorio aportaría el 25 por ciento restante, ha dicho Mateos
