Con esta actuación, ya es posible recorrer la línea por la que discurría la muralla, que ha sido recreada con un pavimento diferente al del resto de las calles en el barrio de Santa Eulalia
ELVIRA SÁNCHEZ. Murcia
Finalizan las obras del trazado de la antigua Muralla medieval de la ciudad de Murcia, que completa un perímetro de 3.000 metros cuadrados.
El alcalde de Murcia, José Ballesta, y los concejales de Cultura y Movilidad Sostenible, Jesús Pacheco y Rebeca Pérez, han visitado esta mañana el trazado que discurre por la calle San Antonio, en el barrio de Santa Eulalia, donde se ha señalizado la calzada con un color diferente en un suelo de estilo adoquinado, y se ha recreado el antiguo Zoco de la Murcia Medieval, al tiempo que se ha convertido todo este entorno en una zona más accesible para el peatón.
De esta manera, ya es posible recorrer la línea por la que discurría la muralla medieval, que ha sido recreada con un pavimento diferente al del resto de las calles, y que recorría la ciudad medieval desde la Puerta de Orihuela hasta la de Vidrieros, siendo a el eje comercial más importante de esa época. Los orígenes de la muralla se remontan al siglo IX y contaba con 90 torres y una decena de puertas.
Aparejado esos dos proyectos, se ha llevado a cabo en diversas calles de Santa Eulalia un proceso de “calmado de tráfico” para reducir los niveles de ruido y favorecer la movilidad peatonal.
Ambas medidas forman parte del proyecto de regeneración ADN Urbano, que ha contado con la aportación de los vecinos para hacer un barrio sea más habitable y peatonalizado: se han elevado los pavimentos de las calles Raimundo de los Reyes y San Antonio para dejarlas a la misma altura que la plaza de Santa Eulalia, además de renovar y ampliar las aceras y el firme de la calzada.
