Así lo ha aprobado la Comisión de Seguimiento Covid-19 ante el aumento de casos en la Región por el brote de Atalayas. Cierran los centros de Día de Totana y Cieza y se limitan las visitas a las residencias de mayores
REDACCIÓN. Murcia
El Gobierno murciano ha prohibido desde este lunes la apertura de locales de ocio nocturno, que solo se permitirá en terrazas y exteriores con todos los clientes sentados, al tiempo que ha limitado a un máximo de 15 personas las que se pueden reunir para eventos de toda índole, sean públicos o privados. La orden ya ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Región de Murcia. Los aforos de bodas, restaurantes, o conciertos al aire libre siguen rigiéndose por las normas de aforo establecidas anteriormente en el BORM de 19 de junio.
Así lo ha anunciado este lunes el consejero de Salud, Manuel Villegas, que ha informado también sobre el cierre temporal de los centros de día para mayores de los municipios de Cieza y Totana y la restricción de visitas a residencias de esos dos municipios, junto con el de Murcia, para prevenir una mayor expansión de los casos de coronavirus.
La decisión se ha tomado en la reunión del comité de seguimiento sobre la Covid-19 tras detectar un aumento de casos constante en los últimos días, relacionados con el brote surgido hace un mes a raíz de tres personas contagiadas que llegaron a la comunidad autónoma desde Bolivia.
Sí se permitirán las terrazas o zonas de exterior en este tipo de establecimientos, donde los clientes deberán estar sentados y guardando las distancias de seguridad. Si un local de ocio nocturno abre el interior tiene que hacerlo en modo cafetería, sentados, y con horario de cafetería.
En cuanto a la limitación de grupos de 15 personas (que antes estaba en 30) se refiere a los casos de reuniones familiares o grupos en terrazas. De este modo puede haber en una terraza dos grupos separados de 15, pero no uno de 30 como hasta ahora.
También se cierran de manera temporal los centros de día para mayores de los municipios de Cieza y Totana, y se prohíben las visitas a residencias de mayores de esos dos municipios, junto con el de Murcia, para prevenir una mayor expansión de los casos de coronavirus hasta el lunes próximo.
Se trata de medidas que se irán revisando y evaluando para comprobar su efectividad. “Debemos adoptar diferentes medidas en función del brote, de su velocidad de propagación y de si existe transmisión comunitaria sin cadenas de contagio establecidas”, explicó hoy el consejero de Salud, Manuel Villegas.
El titular regional de Salud indicó que la situación epidemiológica a día de hoy “es preocupante por el inicio de transmisión comunitaria entre un sector de la población que ya está afectando a otros sectores”.
BROTES ACTIVOS
El número de casos positivos relacionados con el vuelo procedente de Bolivia asciende ya a 105, de los que 40 están relacionados con la zona de ocio de las Atalayas, en Murcia. El Servicio de Epidemiología también ha detectado otro originado en el local de ocio nocturno clausurado el pasado sábado en Totana, que cuenta ya con tres positivos, y otro brote originado tras detectarse un positivo en un paciente del hospital Lorenzo Guirao de Cieza, que cuenta con seis positivos (además del paciente, un visitante del mismo y cuatro trabajadores del hospital).
El número de afectados total desde el inicio del brote de esta pandemia ascendía a 3.570 personas, de los que 1.870 han sido acreditados mediante ‘pcr’, según datos del Servicio de Epidemiología de la Región haya ayer a las 24 horas. El número de casos activos asciende a 158 personas. Veinte personas se encuentran ingresadas en centros hospitalarios, una de ellas en cuidados intensivos. El resto, 138 personas, permanecen en aislamiento domiciliario. Sigue creciendo el número de pruebas realizadas, en concreto 79.203 pruebas ‘pcr’.
Villegas ha señalado que a partir de ahora, el Servicio de Epidemiología considerará a las personas relacionadas con el foco de las Atalayas como un brote independiente al de Bolivia, puesto que los primeros casos del mismo están próximos a recibir el alta, y son ahora estos, derivados de esos locales de ocio, los que más preocupan.
Por eso, ha reiterado el llamamiento a todas las personas que en el mes de julio han salido de fiesta por esa zona, o han estado en el local también cerrado en Totana (que acumula 3 contagios), a que pidan una cita por teléfono o internet para someterse a la prueba PCR, algo que este fin de semana han hecho ya unas 900 personas.
Ha insistido también en la vital importancia de respetar las cuarentenas prescritas por los servicios médicos, incluso cuando una persona haya tenido un resultado negativo en la PCR. “Es muy importante que, quien haya sido contacto estrecho y reciba indicaciones de que debe hacer cuarentena durante 14 días, independientemente de los resultados de las pruebas, si el médico se lo dice, tiene que hacer esa cuarentena, porque existe la posibilidad de que pueda contagiar a otros”, ha reiterado.
En ese sentido, ha advertido de que este brote se desarrollaba en una franja de edad joven, entre 20 y 40 años, pero se ha propagado ya por familiares y contactos de los contagiados, afectando a personas de todas las edades, desde bebés hasta ancianos, que son los que más preocupan.
“Si las cuarentenas no se entienden y hay laxitud en las medidas, la curva volverá a ascender, aumentarán los ingresos hospitalarios y, desgraciadamente, habrá problemas”, ha lamentado.
