El chófer de Alcantarilla lleva día y medio estacionado en las afueras de Londres a la espera de que Francia abra el Eurotúnel tras el cierre decretado tras detectarse una cepa muy contagiosa del coronavirus
JOAQUÍN AZPARREN. Murcia
Sin posibilidad de llegar a casa en Navidad, con el alimento racionado y metido en la cabina del camión viendo llover a gélidas temperaturas lleva ya día y medio Alfredo, un conductor con domicilio en Alcantarilla que a estas horas permanece estacionado en un estrecho apartadero de una carretera local de los alrededores de Londres.
Es uno de los más de 1.500 camioneros murcianos que junto a otras decenas de miles de profesionales del transporte está atrapado sin posibilidad de atravesar el canal de La Mancha o el Eurotúnel tras la decisión de Francia de cortar las comunicaciones con el Reino Unido para prevenir una cepa de coronavirus muy contagiosa.
Alfredo confía en que esta noche se abran las conexiones aunque habida cuenta de la ingente cantidad de camiones pendientes de llegar a Dover no espera llegar al continente antes de dos o tres días. Mientras tanto, a este camionero que volvía de entregar una carga de hortalizas murcianas en Escocia, le toca esperar en unas condiciones muy precarias. Se ha despedido ya de poder pasar al Nochebuena junto a su mujer y sus dos hijos. Será un año más en la carretera como pasará las Navidades
