Un equipo de sanitarios y administrativos del Servicio Murciano de Salud ha trabajado en este servicio donde se ha administrado la vacuna contra el coronavirus a miles de personas
SONIA ILLÁN / SUSANA AZPARREN. Murcia
Cierra sus puertas como vacunódromo el estadio Enrique Roca de Murcia tras seis meses en los que un equipo de profesionales del Servicio Murciano de Salud ha administrado miles de vacunas contra el coronavirus (525.000 dosis) y también, en las últimas semanas, la dosis de refuerzo contra el meningococo a los jóvenes de entre 20 y 13 años.
El coordinador del equipo de enfermería, José Luis García, asegura que la experiencia "ha sido muy gratificante". Han trabajado duro, algunos días se administraba la vacuna a más de 6.000 personas, y ha agradecido el esfuerzo a los profesionales, y también al grupo de administrativos que recogía los datos.
Los primeros en pasar por el estudio para vacunarse fueron los mayores, que demostraron no tener ningún tipo de miedo ante este nuevo proceso, según el coordinador del servicio José Luis García. La sorpresa la dieron las generaciones más jóvenes. Según García "los enfermeros no daban a basto para atender desmayos y lipotimias por el miedo a las agujas". Y anécdotas las hay y muchas, pero no tantas como fotos se han hecho en Nueva Condomina. Y a ello siempre se ha prestado el personal que vacunaba. Estos últimos días bajo las gradas del estadio lo que se ha visto es la vacunación de los repescados por Salud que aun no habían sido inmunizados, más de cien mil en Murcia.
Junto a Nueva Condomina cerrarán antes de que acabe el mes los centros de vacunación masiva de Lorca y Cartagena. Este viernes se ha pasado por el estadio Enrique Roca el consejero de Salud, Juan José Pedreño. Ha agradecido el trabajo del personal que ha estado desplazado alli y también la generosidad del Real Murcia. Tras el cierre del Enrique Roca la inmunización se traslada al jardín del Salitre de Murcia donde también se puede acudir sin cita previa.
