Yolanda Díaz intervino en la clausura del 12 Congreso del sindicato CCOO, que reeligió a Unai Sordo como secretario general al frente de una ejecutiva paritaria cuyo objetivo es articular un nuevo contrato social
AGENCIAS. Murcia
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se comprometía ayer, en la clausura del Congreso de CCOO que reelegía como secretario general Unai Sordo, a derogar la reforma laboral del PP "a pesar de todas las resistencias, que las hay y son muchas".
Ante un auditorio que la recibía entre fuertes aplausos y gritos de "presidenta, presidenta", Díaz reiteró su compromiso con los trabajadores tras el último choque de competencias con la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, a la que desde Unidas Podemos acusan de "injerencia" en el proceso de cambios en la reforma laboral, y que en este mismo congreso afirmaba el pasado jueves que lo hecho hasta ahora eran "contactos preliminares", evitando expresamente pronunciar el verbo "derogar".
Las intenciones de la vicepresidenta primera de liderar la coordinación de estos trabajos de reforma laboral llevaron a Unidas Podemos a solicitar este viernes una reunión urgente de la mesa de seguimiento del acuerdo de coalición de Gobierno con el PSOE.
Díaz, que inició su intervención citando a la escritora Luisa Carnés, de la Generación del 27, insistía en su discurso en la importancia de acabar con la precariedad y la temporalidad, así como de continuar con la senda de subidas del Salario Mínimo Interprofesional, y ha anunciado un "ambicioso" Plan de Choque contra la siniestralidad laboral, para "frenar la lacra de los accidentes mortales".
La polémica a cuenta de la reforma laboral centraba gran parte del primer discurso del recién reelegido secretario general de CCOO, Unai Sordo, que continuará cuatro años más al frente del sindicato tras obtener un mayoritario respaldo del 93,74 %
Sordo, que comenzó pidiendo "respeto" al diálogo social en el que están patronal y sindicatos, también advertía de que habrá movilizaciones si se bloquean las reformas comprometidas y que ya se habían negociado con el anterior gobierno socialista, y recordó nuevamente la necesidad de un contrato social que tenga en el centro el empleo digno.
El secretario de Comisiones Obreras señaló también el ascenso de la ultraderecha y del discurso del odio que intenta dividir y culpar a quien tenemos al lado, en vez de sumarse a la lucha contra un sistema injusto.
Ya en clave más interna, Sordo ha resaltado que éste ha sido "el Congreso del fortalecimiento de CCOO" y supone "un acicate para los retos que tiene CCOO por delante, para afrontar la pospandemia" en un momento delicado, en "una encrucijada de dimensión histórica".
El sindicato afronta así un nuevo periodo con varios objetivos, recogidos en la Ponencia aprobada por el 12 Congreso, y que pasan por la recuperación de derechos de las personas trabajadoras, especialmente los colectivos más vulnerables
