Ángel Valero, nacido en Lorquí , a los 94 años mantiene vivos sus recuerdos de emigrante explorador
ANA R. GÓMEZ / Murcia
En las camas del hospital hay multitud de historias extraordinarias, y hoy tenemos la suerte de contar la de Ángel Valero García que, con casi un siglo de vida, cuenta como si fuera ayer mismo su aventura transatlántica, la que lo llevó en su juventud hasta América del Sur y a la selva amazónica, donde fue adoptado por una tribu ignota.
Plasmó sus experiencias en los años 80 del pasado siglo, escribiendo y editando el libro REY CANÍBAL MURCIANO. Explica que, después de ser adoptado, fue designado rey, que siempre ha recordado su origen y su familia de Lorquí, en la Región de Murcia, y que lo de caníbal viene porque esa tribu acostumbraba a incluir carne humana en su dieta. Esa costumbre fue desterrada por su particular "Constitución", que incluía la igualdad entre hombres y mujeres.
A los 94 años, Ángel Valero es tan amigo de la fama como cuando le contaba sus experiencias al periodista murciano Manuel Muñoz, que escribió sobre él un llamativo reportaje en el diario El País allá por el año 1980. Su historia ha tenido más recorrido: en el blog Descubriendo Murcia o, aún más recientemente, en la cuenta de twitter @cantonalismemes con un hilo ilustrado de lo más detallado.
En estos días su salud se ha resentido. Ingresado en el Hospital Morales Meseguer, ha contado parte de su vida a la doctora Carmen Moreno que, con permiso de Valero y de su nieto inseparable, nos ha prestado estos testimonios grabados en un sencillo vídeo sobre los años que pasó en la selva, donde dejó mujeres e hijos por decenas.
La vida de Ángel Valero y parte de su familia quedó en paradero oculto, donde hoy él mismo considera que sería imposible llegar. Fue su particular Eldorado... de hecho, allí quedaron también más de dos mil kilos de oro.
Pumas, lobos, serpientes, mucha vegetación y mucho peligro. Lo recuerda y lo cuenta Ángel Valero, nacido en Lorquí y autotitulado REY CANÍBAL MURCIANO.
