Una vez practicada la autopsia, el abogado de la familia iniciará acciones penales por posible homicidio imprudente
ANA R. GÓMEZ / EFE. Murcia
Ha fallecido Sara Gómez, la mujer de 39 años que sufrió graves complicaciones después de haberse sometido a una operación estética en una clínica privada de Cartagena. Las acciones legales que se habían iniciado pasan ahora al terreno de lo penal, según el abogado que lleva el caso por encargo de los familiares.
El letrado, Ignacio Martínez, ha declarado a Onda Regional de Murcia que la familia está destrozada. Sara, vecina de Alcantarilla, era madre de dos niños. Aunque su situación era grave, aún había quien mantenía la esperanza de otro desenlace más positivo.
El letrado, que trabaja en un equipo especializado de la asociación Defensor del Paciente, explica que ya no se trata de lesiones, sino de posible homicidio por imprudencia. En cuanto se solvente la autopsia, acudirán al juzgado de guardia. Se trata, nos dice, de un caso realmente excepcional.
Esperan que la investigación sirva para esclarecer lo ocurrido, porque la posibilidad de una mala praxis no explica la gravedad a la que llegó el estado de Sara después de acudir a una intervención considerada sencilla.
Sara había sufrido múltiples perforaciones y lesiones en el riñón, el hígado, el duodeno, el colon y el intestino tras la lipoescultura que se le hizo el 2 de diciembre pasado.
Según la agencia EFE, la denuncia en fiscalía indica que el médico que la intervino inició su licenciatura en Chile, la siguió en Murcia y la concluyó en Nápoles (Italia) y hasta mayo de 2020 fue cirujano cardiovascular del Servicio Murciano de Salud. Recientemente obtuvo el máster en medicina estética y antienvejecimiento por la Universidad Complutense, de Madrid.
La intervención, contratada en la clínica Galena de Murcia, duró cinco horas, tras las que se informó a la familia de que todo había salido bien, pero que había perdido líquidos y sangre, por lo que estaban estabilizándola, ya que costaba mantenerle la tensión, por lo que tenía que estar mas tiempo en el quirófano. Más tarde se decidió trasladarla al hospital público de referencia en la ciudad portuaria, donde entró en urgencias con shock hipovolémico en situación de extrema gravedad.
El parte medico cita "necrosis de la pared abdominal, peritonitis, absceso con contenido intestinal, disección de todo el retroperitoneo derecho e izquierdo con exposición de ambos músculos psoasiliacos, congestión gastrointestinal con múltiples perforaciones", entre otras.
Según la denuncia, estos hallazgos no se pueden en ningún caso justificar como un riesgo típico de una intervención estética de lipoescultura, por lo que pedía a la fiscalía que tomara muestras por posible consumo de drogas del cirujano y que se investigue a todas las personas que participaron en la intervención en la clínica privada.
