Por el contexto socioeconómico actual los jóvenes tardan más en comenzar sus proyectos de vida, y por tanto, en tener hijos
ÁNGEL IZQUIERDO
La precarización del empleo juvenil y la falta de políticas para favorecer la emancipación son los factores que más influyen en el descenso de la natalidad, ya que los jóvenes tardan más en comenzar sus proyectos de vida, y por tanto, en tener hijos.
La socióloga Lola Frutos Balibrea explica que es necesario que la política nacional tome conciencia de la importancia de tener un relevo generacional y trate de mejorar el contexto socioeconómico en el que se encuentran los jóvenes cuando terminan sus estudios.
Lola Frutos destaca que en la Región de Murcia la natalidad de los inmigrantes era crucial para que el sistema no colapsara y se mantuviera un incremento en esta tasa. Sin embargo, es una tendencia que ha cambiado en los últimos tiempos, ya que hay muchas mujeres que viven una situación precaria al destinar parte de su sueldo a la familia en su país de origen, y otras, tras mucho tiempo en España, se adaptan a la cultura de trabajar, independizarse y pasa a ser secundario el hecho de tener hijos.
La socióloga piensa que esta inclinación estructural hacia la natalidad de los inmigrantes debería cambiar, con políticas de inclusión para la mujer moderna, joven, que estudia y busca una situación estable en el mercado laboral.
Por contra, la mortalidad ha aumentado en la Región en lo que llevamos de 2022, y aunque los principales motivos pueden ser los últimos efectos de la pandemia y las altas temperaturas que estamos sufriendo este verano, Lola Frutos va más allá. Habla de la vulnerabilidad que sufren en la actualidad las personas mayores de clase media-baja que, señala, no reciben una atención primaria de calidad.
