Según el informe del Banco de España. El director del departamento de economía aplicada de la Universidad de Murcia, Francisco Maeso, puede generar un problema social grave en una comunidad como la nuestra
El Informe de Estabilidad Financiera que el Banco de España ha publicado hoy alerta de que la subida de tipos de interés y el incremento de costes financieros que conlleva puede colocar en niveles de riesgo a más de un 35% de los hogares más vulnerables de nuestro país y a un porcentaje también importante de las familias con rentas medias. El director del departamento de economía aplicada de la Universidad de Murcia, Francisco Maeso, señala que esa situación puede generar un problema social especialmente grave en una comunidad como la nuestra, en la que hay un gran número de hogares en situación de especial vulnerabilidad.
Explica Maeso que la subida de tipos es una medicina contra la inflación que el Banco Central Europeo va a seguir administrando a la economía de toda la Unión. No cabe esperar cambios en esa estrategia a corto o medio plazo, entre otras cosas porque el precio del dinero no está todavía en niveles especialmente altos: un tres y medio por ciento, nos dice, no es un tipo de interés desaforado. El problema es que veníamos de niveles bajísimos y la subida ha cogido desprevenidas a muchas familias, que no contaban con este coste añadido. Un desfase que, además, viene a sumarse al incremento del resto de costes, tanto energéticos como en alimentación o bienes de consumo.
Las familias murcianas no tienen una deuda financiera muy superior a la media nacional. Pero en esta región sí que hay muchos más hogares vulnerables o bordeando esa situación. Desde ese punto de vista, el impacto de la subida de tipos sobre el conjunto de la economía será mayor en Murcia que en otras comunidades.
El incremento de costes financieros no sólo afecta a las familias vulnerables. De hecho, en términos absolutos lo habitual es que una familia con un alto nivel de renta se vea más afectada por la subida de tipos de interés que otras con menor poder adquisitivo, precisamente porque el importe de su hipoteca puede ser muy superior. Lo que ocurre, explica Maeso, es que en un hogar con muchos recursos hay margen para reducir gastos, mientras que los más débiles es poco probable que dispongan de ese colchón. Por eso, desde su punto de vista, lo razonable sería que las administraciones plantearan medidas de ayuda personalizadas, centradas en las familias con una situación más delicada.
