Jorge Sánchez, biólogo de la Asociación de Naturalistas, dice que lo ideal es reutilizarla. La especie de alga más retirada este año del interior del Mar Menor es una variedad filamentosa llamada cabello de ángel
MACU ALEMÁN. Cartagena
Compostaje, pistas de instalaciones hípicas o vertederos. Es el destino final de las 6.000 toneladas de algas, 5.000 por tierra y 1.000 por mar, que se han extraído en lo que va de año de la ribera y el interior del Mar Menor.
Se trata, según fuentes de la comunidad autónoma, de residuos difíciles de aprovechar por su alto contenido en sal y que están siendo recogidos por empresas que, a su vez, se encargan de llevarlas a gestores autorizadores de residuos. Desde 2017 se han recogido 13.300 toneladas por tierra y mil por mar. En lo que va de 2002 ya se han extraído la misma cantidad del Mar y otras seis mil por tierra. Desde la Consejería no facilitan información más concreta sobre la trazabilidad de estas algas. Lo ideal, dice Jorge Sánchez, biólogo de la Asociación de Naturalistas, sería reutilizar toda esta biomasa.
La especie de alga más retirada este año del interior del Mar Menor es una variedad filamentosa llamada cabello de ángel. No siempre ha sido la más común y suele utilizarse en acuicultura.
