El rector de la Universidad de Murcia ha tomado posesión de su cargo tras su reelección impacto económico que tendrá en las arcas de la institución el sobrecoste de la electricidad
ANABEL ARAMENDÍA. Murcia
José Luján ha tomado este viernes posesión de su cargo como rector de la Universidad de Murcia (UMU) con el reto de sentar las bases de la que será la “universidad del futuro” y, más a corto plazo, el de gestionar el impacto económico que tendrá en las arcas de la institución el sobrecoste de la electricidad, que alterará la previsión presupuestaria.
Luján ha asegurado que asume este segundo mandato con el afán de dar continuidad al proyecto que comenzó hace ya cuatro años. En su primer mandato, ha subrayado la dificultad que supuso gestionar la institución docente en el contexto de la pandemia del coronavirus. Ahora comienza con el inicio de la guerra de Rusia sobre Ucrania y la crisis energética. No obstante, ha asegurado que hay espacio para la “esperanza”, a pesar de que “el contexto económico lo condiciona todo”, como ya ocurrió con la gran crisis de la burbuja inmobiliaria de hace 10 años.
José Luján ha pronunciado un discurso en el que ha destacado la apuesta por la internacionalización de la institución. Se trata de un objetivo de los rectores de los últimos años y que se prorroga en el tiempo. Así, el rector ha anunciado que hoy la UMU se une a la Universidad Europea para el Bienestar convirtiéndose en el octavo socio de la alianza. José Luján asegura que estas alianzas suponen un punto de esperanza ante la guerra de Ucrania.
Luján ha confiado en poder hacer frente a la situación y ha señalado que el próximo plan plurianual de financiación que se está negociando con la comunidad autónoma deberá contemplar no solo esta situación, sino también y de manera especial los fondos necesarios para afrontar las necesidades de la universidad del futuro.
En el acto ha participado el presidente de la comunidad autónoma, Fernando López Miras, quien ha deseado a Luján para este mandato “tantos aciertos” como los cosechados en el anterior, donde logró gestionar con éxito la pandemia, que obligó a la universidad a “reinventarse” y a seguir garantizando la formación de los alumnos.
Además, ha trasladado el “compromiso inequívoco” de su Gobierno con la UMU, que ha definido como “el centro del talento y el progreso” de la región, y un baluarte fundamental para seguir potenciando su desarrollo y crear nuevas oportunidades de crecimiento.
