El experto consultor en mercados energéticos señala que el resto de la OPEP no desafiará a Rusia elevando la producción si Europa decide terminar con todas las importaciones de gas y petróleo de ese país.
El escenario de comienzos de 2023 con la gasolina y el diésel a 3 euros el litro no es descartable si continúa la invasión de Ucrania y Europa sigue recortando las importaciones de petróleo ruso. Es la opinión de Jaime Brito, experto en la consultora energética Baker & O´Brien de Houston en Tejas.
Brito comenta que es muy posible que los precios durante este año se mantengan estables en una franja de entre 105-110 dólares barril Brent lo que se traducirá en que los carburantes se estabilicen. Pero, llegado el invierno, si confluye una mayor demanda por las bajas temperaturas con un recorte de las importaciones desde Rusia, la cotización llegará a los 125 dólares y no de forma puntual. Este experto en mercados energéticos añade que la OPEP no está dispuesta a aumentar su producción porque Europa deje de comprar a Rusia. Los precios les benefician y no quieren enfrentarse al que es uno de sus miembros.
También desmonta la explicación de que algunas refinerías no están preparadas técnicamente para tratar petróleo de otras latitudes diferentes a Rusia como se ha dicho para justificar el alza de precios. Lo que ocurre es que las del centro de Europa dependen del oleoducto que llega de ese país y no pueden contar con materia prima de otras vías. Eso hace que su producción caiga y que las situadas junto al mar se beneficien de una mayor demanda.
