¿Cuándo debería un adulto sano ir al médico de familia? Con Juan Enrique Pereñíguez
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Por supuesto, la salud será un asunto fundamental, pero no solo la salud, porque para el bienestar de un ser humano son importantes también las cuestiones de seguridad económica, de estilo de vida e incluso, las relaciones sociales, así que tendremos un poco de todo, siempre con el enfoque de mejorar nuestra vida.

 

Para empezar, hemos llamado a Juan Enrique Pereñíguez. Es médico especialista en medicina familiar y comunitaria y tiene más de 40 años de experiencia en atención primaria. Queríamos que nos respondiera, sobre todo, a una pregunta: ¿Por qué motivos un adulto sano debería acercarse a su médico de familia? ¿Qué revisiones o chequeos son los que de verdad pueden ayudarnos a prevenir problemas mayores? ¿Cuáles son estrictamente necesarios? 

 

CONCLUSIONES

De lo que nos ha contado Juan Enrique Pereñíguez hemos sacado estas conclusiones.

• A partir de los 40 años, todo el mundo debería solicitar a su médico una analítica general si no ha tenido ningún motivo para pedirla antes, y si el resultado es normal, será el médico quién le aconseje cuándo volver a realizarla. 
• Aquellas personas que tienen obesidad o sobrepeso deberían controlarse el colesterol, la diabetes y la hipertensión y saber que reducir 10 o 15 kilos su peso no es una cuestión de estética, sino que puede ayudarles a reducir esos problemas.
• La propia administración se encarga de avisarnos de cuándo debemos realizarnos los cribados de cáncer de colon, mediante la muestra de sangre en heces y de cáncer de mama con las mamografías y en el caso de las mujeres, será su médico quién les diga también que cada 2 o 3 años tienen que realizarse una citología.
• Los varones sanos, sin síntomas, a partir de los 40 deberían incluir en su analítica el PSA que ayuda  a detectar precozmente el cáncer de próstata. 
• El médico de familia puede echarnos una mano también para eliminar malos hábitos como fumar y controlar problemas cardíacos mediante auscultación, ecografías o electrocardiogramas y derivarnos a un  especialista en caso necesario. 
• Y todos deberíamos incrementar la actividad física y los ejercicios de fuerza, pero  sobre todo, es fundamental en las personas mayores. 
• Igual que es importante  tener vida social y cuidar las relaciones personales para que nuestra salud mental no se resienta.