La Asociación Española de Pediatría ha puesto de manifiesto que, en la Región, los problemas de salud de los menores son resueltos por un médico de familia
En esta región, cuatro de cada diez menores de quince años no tiene un pediatra que le atienda y sus problemas de salud han de ser resueltos por un médico de familia. El dato se ha puesto de manifiesto en la inauguración del congreso que la Asociación Española de Pediatras de Atención Primaria celebra en Madrid. Murcia es una de las comunidades en las que esta situación es más frecuente, por detrás de Baleares o Castilla La Mancha, en donde el porcentaje llega al 50%.
Que un niño o un preadolescente sea atendido por un médico de familia no es en absoluto la mejor alternativa, según el doctor Juan Antonio Carmona, miembro de esta asociación de pediatras de primaria, porque un menor no es un adulto "pequeñito". Los médicos de familia, dice Carmona, carecen de los conocimientos especializados para enfrentarse a según qué problemas, aunque la situación no tiene una solución sencilla. Al menos, dice este especialista, que no se repitan ahora los errores de planificación que nos han traído hasta aquí.
La escasez de pediatras, añade Carmona, es una circunstancia que no podrá resolverse hasta dentro de una década, porque se tarda entre 11 y 14 años en formar a un especialista. Lo que sí se pueden tomar son medidas organizativas que reduzcan los riesgos. La Asociación de Pediatras de Primaria ya le ha propuesto al Servicio Murciano de Salud que cree la figura del especialista "de apoyo", un pediatra de referencia que pueda asesorar a los médicos de familia a los que les surjan dudas en el tratamiento de un paciente de menos de quince años.
