Un proyecto que se redactó hace casi 15 años, que estuvo paralizado durante mucho tiempo, tras la llegada al Gobierno de Castilla La Mancha de María Dolores de Cospedal y hoy se abre el primer ramal de los 4 previstos
El trasvase Tajo-Segura tiene desde hoy una nueva servidumbre, con la entrada en funcionamiento de la denominada "Tubería Manchega", una conducción que captará caudales del acueducto para abastecer de agua potable a 80 poblaciones de las provincias de Albacete, Cuenca y Ciudad Real. Localidades que, hasta ahora, utilizaban recursos procedentes de los acuíferos subterráneos, que es de menor calidad, por lo que muchos de ellos optaban por consumir agua embotellada. En el acto de inauguración ha participado el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García Page, que ha celebrado la puesta en marcha de una infraestructura que se ha enfrentado, según sus palabras, a los "enemigos del Levante, que han buscado, aunque no pudiéramos beber, regar primero".
La tubería manchega es un proyecto que se redactó hace casi 15 años, pero que estuvo paralizado durante mucho tiempo, tras la llegada al Gobierno de Castilla La Mancha de María Dolores de Cospedal. Hoy ha entrado en funcionamiento el primero de los cuatro ramales previstos, que inicialmente permitirá beber agua del Tajo a unos 80.000 habitantes de 15 municipios, como Villarrobledo o San Clemente, y al que próximamente se sumarán otros como Tarancón. Esto era lo que decían, precisamente, los alcaldes de esos municipios: Charo Sevillano, de San Clemente; Valentín Bueno de Villarrobledo y José López, de Tarancón.
La tubería manchega capta los caudales desde la cabecera del Tajo, en concreto de un pequeño embalse en el arroyo de Valdejudíos, para conducirlos luego a una Estación de Tratamiento de Aguas Potables que está ubicada en Saelices, en la provincia de Cuenca. El consejero de Agricultura y Agua, Francisco Martínez Arroyo, subrayaba el valor simbólico que tiene el hecho de que el agua se detraiga directamente del trasvase Tajo Segura.
Aunque la población a la que se abastecerá en un primer momento ronda esas 90.000 personas de las que hemos hablado, la potabilizadora de Saelices tiene capacidad para satisfacer las necesidades de medio millón de personas, que es el objetivo a cubrir cuando todos los ramales estén concluidos.
La puesta en marcha de esta tubería manchega tiene otro efecto: a partir de ahora, los municipios que se abastecen de ella tendrán voz y voto en la Comisión de Explotación del Trasvase. Dice el Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, que estamos ante un nuevo escenario en el que la búsqueda de consensos va a ser imprescindible.
Como escuchábamos al inicio, el presidente de Castilla La Mancha ha dado valor histórico a la puesta en marcha de esta infraestructura. A su juicio, pone fin a una discriminación histórica; a partir de ahora, los vecinos de Albacete, Cuenca y Ciudad Real tendrán los mismos derechos que los de Murcia, Alicante o Almería.
García Page ha dejado este último mensaje: él sí puede presumir de hacer realidad el lema de "Agua para Todos".
¿Qué dicen de todo esto la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT) y la Confederación Hidrográfica del Segura? Pues absolutamente nada.
Desde Mancomunidad se han excusado explicado que hoy han estado centrados en la reunión de su Junta Directiva y que no conocen los detalles de esta infraestructura (que, como les hemos contado, está proyectada desde el año 2009). Y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura nos remite a su colega en el Tajo para que nos facilite información al respecto. Ni una sola valoración de lo que supone la incorporación de estos miles de nuevos usuarios del trasvase; ni un cálculo, siquiera aproximado, de los recursos que dejarán de estar disponibles para el regadío y del efecto que ello tendrá en el plan de cuenca del Segura. Silencio absoluto.
Sí ha reaccionado el presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase, Lucas Jiménez. En su opinión, la obra no representa novedad alguna, porque se limita a dar cumplimiento a lo que prevé la ley. El problema, desde su punto de vista, es el tono de las declaraciones del presidente de Castilla La Mancha, al que llega a calificar de "payaso", por tratar de establecer una falsa competencia entre las demandas de riego del levante y las necesidades de abastecimiento humano de cualquier población, sea ribereña del Tajo o de cualquier parte de España. Jiménez cree que García Page no necesita seguir "haciendo sangre" contra el Levante, porque está claro que ya ha ganado la batalla.
