La ONG ha presentado un estudio, "Ser pobre en España", en el que pone de manifiesto la subida del precio de los alimentos y las consecuencias devastadoras que ha tenido, sobre todo, para las familias más vulnerables
Tener empleo no es suficiente para salir de la pobreza. Lo ha constatado la ONG Save The Children en su estudio "Ser pobre en España" que pone de manifiesto, también, que la subida del precio de los alimentos ha sido devastadora para las familias más vulnerables, que la pobreza energética tiene rostro de infancia y que las ayudas sociales no llegan a las familias necesitadas.
Tras consultar a 1.170 familias, Save The Cildren ha podido constatar que, a pesar de que el 51% tiene empleo, los padres y las madres de esos menores de edad no consiguen salir de la pobreza. En su caso, es un esfuerzo que no obtiene recompensa, según explica Andrés Conde, director general de la ONG.
El estudio revela que el aumento del precio de los alimentos ha supuesto un cambio de hábitos en las familias, de manera que en el 65% de ellas, todos los miembros han tenido que disminuir el consumo de carne, pescado o fruta.
Además, las familias en situación de pobreza extrema se encuentran con barreras específicas a la hora de enfrentarse a la solicitud del Ingreso Mínimo Vital: burocracia, brecha digital, idioma, dificultades con el empadronamiento o las listas de espera.
Pero pese a este complicado panorama Save The Cildren considera que 2024 va a ser un buen año para mejorar la situación de estas familias. Entra en vigor la Garantía Infantil Europea que mandata a los estados miembros de la UE a destinar un 5% del fondo social europeo a luchar contra la pobreza infantil.
