El presidente de ASFASPRO lamenta la falta de reconocimiento del colectivo que ha dado muestras de sacrificios a cambio solo de buenas palabras y con las nóminas más bajas de la Administración
Las Fuerzas Armadas han perdido en los últimos años alrededor de diez mil militares por salarios bajos y ausencia de carrera profesional. Es la denuncia de asociaciones como ASFASPRO que exigen al ministerio de Defensa una política de personal adecuada al trabajo, la formación y los riesgos que asume el personal de los tres ejércitos.
La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas, que cuenta con más de seis mil afiliados, alerta del goteo constante desde hace una década de profesionales que abandonan la vida militar para ocupar puestos de guardias, bomberos o policías, mejor retribuidos y con mayor proyección de futuro.
El colectivo constata diferencias salariales entre categorías equivalentes del mundo civil, de entre ochocientos y mil euros por encima de lo que cobra un militar. Miquel Peñarroya, presidente de ASFASPRO, asegura que el problema afecta a los tres ejércitos.
Peñarroya califica de ridícula la última subida salarial pactada con Defensa y añade que desde 2005, con José Bono de ministro de Defensa, no se ha producido una actualización de retribuciones digna.
Reclaman al ministerio cambios drásticos en la política de personal. Peñarroya afirma que las diferencias salariales entre militares y Fuerzas de Seguridad del Estado son cada vez mayores y que la situación ha empeorado con la actual ministra.
El presidente del colectivo de suboficiales lamenta la falta de reconocimiento, dice, de un colectivo de hombres y mujeres que ha dado muestras sobradas de sacrificios a cambio solo de buenas palabras y las nóminas más bajas de la Administración.
