El Síndrome Post Cuidados Intensivos afecta a un número significativo de personas
El hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia ha puesto en marcha recientemente una nueva consulta externa con especialistas de Medicina Intensiva para hacer seguimiento a los pacientes dados de alta tras ser ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de este centro.
La directora general de Atención Hospitalaria, Irene Marín, ha explicado que este nuevo servicio "forma parte de la estrategia de humanización que está desarrollando el Área I de Salud, que persigue una sanidad menos tecnificada y más personalizada, centrada siempre en el paciente". Ha añadido que este recurso también se ha puesto en marcha en el hospital Santa Lucía de Cartagena o el Morales Meseguer de Murcia.
El equipo responsable de la nueva consulta post UCI está formado por seis profesionales: una facultativa especialista en Medicina Intensiva y cinco enfermeras, que valoran a los pacientes físicamente, pero también psicológicamente.
En este sentido, Marín se ha referido al Síndrome Post Cuidados Intensivos que es una patología "recientemente descrita, pero que afecta a un número significativo de personas, y abarca un amplio grupo de problemas de salud que se mantienen tras la enfermedad crítica que ha llevado a esos pacientes a la UCI".
En la consulta post UCI se cita no sólo a los pacientes, sino también a sus familiares. Mediante una entrevista en profundidad se evalúa cómo cada núcleo familiar ha resuelto las nuevas situaciones que se hayan podido presentar y cómo estas han afectado al paciente y su entorno.
Después, la facultativa analiza el estado físico del paciente, esto es, su estado nutricional, la capacidad de movilidad y fuerza muscular, si existe dolor persistente, si padece ansiedad, pérdida de memoria y cómo es su velocidad mental, entre otras.
Por su parte, las enfermeras se centran en el rol del cuidador y la repercusión familiar del cuidado del paciente tras el alta. En este sentido, se centran en la sobrecarga que percibe quien cuida del afectado, los recursos de los que dispone y si padecen aislamiento social, o cómo el cuidador concilia el trabajo con sus otras obligaciones.
También estima si es precisa la derivación psicológica a un especialista en salud mental o si es necesaria la coordinación con su centro de salud para la asistencia de otras necesidades concretas.
El año pasado, más de 2.100 pacientes ingresaron en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Virgen de la Arrixaca, y en lo que va de año, casi 1.200.