Este jueves solo quedaba en pie uno de los seis escenarios que han llegado a estar en marcha. El Motoclub de Fuente Álamo lamenta los daños que la fiesta está causando en el circuito
El presidente del Motoclub de Fuente Álamo que gestiona el circuito municipal de velocidad donde se celebra la macrofiesta ilegal, lamenta los daños que los participantes están causando en unas instalaciones que han construido ellos mismos y que levan 18 niños cerradas.
Jerónimo Castillejo, en declaraciones al digital El Español, dice que ha podido entrar al circuito y echar un primer vistazo a los daños que se están causando en las instalaciones. Castillejo pide a los participantes que desalojen pronto y no deterioren el circuito
Para cuando todo haya pasado, Jerónimo Castillejo pide ayuda y presupuesto a las administraciones para terminar de una vez unas instalaciones en las que han puesto años de esfuerzo y recursos propios y que a varios miembros del club, como es su propio caso, los tiene endeudados
La macrofiesta ilegal que cuenta hoy su sexto día consecutivo instalada en el circuito de velocidad de Fuente Álamo, pierde fuelle. Este jueves por la mañana solo quedaba en pie uno de los seis escenarios que han llegado a estar en marcha y se ha registrado la salida de cientos de vehículos, camiones incluidos, en los que se transportaban potentes equipos de música y los grupos electrógenos para alimentarlos, según fuentes de la Delegación del Gobierno.
La fecha tope para la finalización del evento antes de un posible desalojo -ayer se consideró inviable- era el seis de enero, según informaba la Guardia Civil. Es la que manejaban también los organizadores pero en las últimas horas la actividad decae. Las fuerzas de seguridad que mantienen vigilado el recinto han seguido imponiendo sanciones por delitos contra la seguridad vial, consumo de drogas y acampada ilegal.
En el transcurso del primer día del evento, ingresaron 2.123 vehículos, de los cuales más de mil ya han abandonado las instalaciones, aunque todavía quedan 1.100 automóviles presentes en el recinto. Con el objetivo de asegurar la seguridad y una salida adecuada de los participantes, se ha reforzado el número de efectivos de la Guardia Civil y la Policía Local en el lugar.
La delegada del Gobierno, Mariola Guevara, asegura que “cada vehículo que abandona el recinto es sometido a un exhaustivo proceso de revisión y análisis y se recaban todos los datos posibles, especialmente los vehículos como camiones que transportan los altavoces, escenarios y otros materiales”.
En cuanto a las acciones de seguridad y control, se han emitido cerca de 150 sanciones administrativas, 47 sanciones por test de drogas y 90 sanciones por tenencia de drogas. Además, se ha detenido a un ciudadano de nacionalidad brasileña por tráfico de drogas al que se le incautaron 90 dosis de LSD cartón y 4.1 gramos de LSD líquido.
La Ordenanza Municipal de la Policía Local de Fuente Álamo ha impuesto 20 denuncias por la realización de acampadas en zonas no habilitadas. Se está realizando, por otra parte, un trabajo interno para recabar información y analizar datos, y ponerlos a disposición de la Comunidad Autónoma para abrir expedientes sancionadores conforme a la ley de espectáculos públicos y la normativa sanitaria. Esto se debe a la falta de autorizaciones necesarias para los diferentes comercios de comida, ropa y merchandising que operan dentro del circuito donde se realiza el evento, ha indicado la Delegación del Gobierno.
Para fortalecer las acciones de identificación, se han captado imágenes por drones y helicóptero con el fin de obtener datos necesarios para localizar a los organizadores y aplicarles las sanciones correspondientes.
La 'rave' se asentó en la madrugada del 31 de diciembre; esa misma noche fue alertada la Delegación del Gobierno y se activó un operativo de seguridad que cuenta con la participación de un centenar de efectivos de la Guardia Civil y la colaboración de la Policía Local de Fuente Álamo.