El año pasado se atendieron a más de 840 personas en esta unidad, cifra que va a aumentar debido al incremento de la población adulta
La Unidad del Servicio de Neurología de la Arrixaca, la que se ocupa de los pacientes con accidentes cerebrovasculares, atendió el año pasado a más de 840 personas. Es una cifra que va a aumentar como consecuencia del incremento de la población adulta y de la prevalencia de otras dolencias que favorecen que se produzca un ictus
Los síntomas son la pérdida de fuerza, desviación de la boca, visión borrosa o pérdida de la capacidad para hablar. Pero el 50 por ciento de los pacientes supera la crisis casi sin secuelas. En este tipo de accidentes cerebrovasculares cada segundo importa, dice el consejero de Salud, Juan José Pedreño.
La unidad acaba de aumentar el número de camas y pasa así de 7 a 10, lo que permite que el paciente permanezca más tiempo ingresado. Así se pueden prevenir eventos consecutivos y minimizar las secuelas futuras.
El consejero advierte que es habitual en estos pacientes sufrir accidentes cardiovasculares consecutivos, por lo que esta es una forma de "disminuir la mortalidad y, sobre todo, las secuelas".
Pedreño destaca los buenos resultados de programas como Teleictus. En 2023 se implantó en Cieza, Yecla y Lorca; está pendiente Caravaca de la Cruz. Gracias a este tipo de iniciativas se mejora el tiempo de asistencia, es decir, permite reducir la mortalidad y las secuelas graves.
Desde la Consejería de Salud recuerdan que el ictus se puede prevenir atajando otras dolencias como la hipertensión, la hipercolesterolemia, la diabetes la obesidad, el tabaco o el sedentarismo.
