La Asociación de Afectados de Dilaciones Indebidas de la Fundación Zaballos, encabezada por Emilia Zaballos dice que "estamos sobrelegislando sin asegurar ningún control ni que la sociedad vea que esa ley sirve"
Que las causas judiciales, del tipo que sean, se sustancien con retraso es algo frecuente pero no debería serlo cuando pueden acabar vulnerando derechos constitucionales. Una sentencia del Tribunal de Garantías, así lo recogió hace apenas dos años justo cuando nació la Asociación de Afectados de Dilaciones Indebidas dentro de la Fundación Zaballos. Su responsable dice que la Justicia existe pero el sistema no funciona.
En sus oficinas de Madrid, Emilia Zaballos atiende multitud de quejas, que en algunos casos, acaban en reclamaciones para las que también hay que armarse de paciencia. Abarcan desde la violencia sexual, homicidios, estafas y también el Derecho Civil. Se legisla mucho pero la norma no se cumple.
¿Toda la culpa es del atasco en los juzgados? En gran parte sí, pero no únicamente por la falta de personal, sino también por el poco rigor con el que algunos desempeñan su trabajo. Para Zaballos no siempre se hace justicia cuando el culpable pacta y todo queda en multa económica. Hay un daño moral del que nadie habla, y por el que se debe reclamar.
En el caso de las niñas, víctimas de abuso en Murcia, que acabó con acuerdo de conformidad, benefició a los autores que no irán a la cárcel, pero no parece que la indemnización que ellas van a recibir sea justa.
