EL MIRADOR. La entrada al mirador
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Buenas tardes,

 

Si están escuchando, leyendo y viendo medios de comunicación desde ayer, habrán visto más mujeres que nunca. Somos la mitad de la población, pero un día al año se nos visibiliza y los medios, las empresas y las administraciones piensan “vamos a hacer una cosa bonita en color violeta” y mañana ya veremos.

 

El que las mujeres sean las protagonistas de los medios estos días demuestra que hay mujeres expertas en cualquier cosa que se te ocurra y que podríamos recurrir a ellas en cualquier otro momento del año. Y además, podríamos llamarlas para que hablaran de su especialidad y no de qué les supone el hecho de ser mujer o de la conciliación, esa palabra maravillosa que se asocia a las mujeres cuando debería ser la aspiración de todos los seres humanos. Conciliar significa que tienes derecho a trabajar y quieres hacerlo, pero que además, quieres tener tiempo para tu familia y para ti. Es raro que los hombres no lo reivindiquen también.

 

He elegido de nuevo a Dolly Parton para empezar con una canción que se hizo famosa por la película del guardaespaldas y que asociamos a una historia de amor. Pero no. Dolly se la escribió al que fue su manager durante 7 años y le dice que siempre le querrá, que espera que la vida le trate bien, pero que quiere hacer las cosas a su manera y tiene que dejarle. 

 

La semana pasada escuchábamos a Dolly cantar lo de que de 9 a 5 trabajo y de 5 a 9 sueño y hago lo que quiera y hoy esta canción que es el “adiós ahí te quedas” más elegante que he escuchado nunca y otro alegato a la independencia de las mujeres profesionales. 

 

MARTA FERRERO