La entrada al mirador

Buenas tardes, a estas alturas ya habrán escuchado varias veces que este programa se llama el mirador. Pero me gustaría que pensáramos un poco juntos qué significa exactamente esa palabra.

Mirador es el que mira, pero si hubiera querido coger solo ese significado, hubiera elegido la miradora, y no, el programa no se llama la miradora aunque lo va a llevar una persona que mira, que observa y que se hace muchas preguntas y tiene la suerte de poder buscar todos los días a personas más expertas con las que intentar resolver esas dudas. 

Mirador es un corredor, galería o pabellón para explayar la vista y también un lugar bien situado para contemplar un paisaje o un acontecimiento . Así que a la miradora no le hacen falta prismáticos, porque ya está en el mejor lugar para verlo todo. Pero tampoco es ese el significado que más me gusta. 

Mirador es un balcón cerrado de cristales o persianas y cubierto con un tejadillo. No sé si lo habían pensado alguna vez, seguro que en estas últimas semanas han mirado muchos balcones y si tienen suerte, han mirado desde su balcón como pasaba la vida por la calle sin poder salir. Pues el mirador es como un balcón tímido, recogido, que duda entre si sale de casa o se queda formando parte de ella. 

Un lugar desde el que mirar sin que te vean, porque se puede uno esconder tras las cortinas. Un poco como la radio, que entra en sus casas pero sin que ustedes vean quién está ante el micrófono.

Así que ya saben que este mirador quiere ser parte de sus casas y que no pretende sólo hablarles, también quiere escucharles con su permiso.