Alfonso Hernández: "Ni las mutuas ni la sanidad pública tienen medios suficientes para tratar las bajas por salud mental"
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Durante la pandemia, los graduados sociales tramitaron el 80 % de los ERTE pero siguen siendo una profesión algo desconocida. Alfonso Hernández Quereda, decano del Colegio de Graduados Sociales, define esta profesión diciendo que un graduado social es un experto en relaciones laborales y recursos humanos.
Algunos de los factores que influyen a esta situación de baja laboral son: la inestabilidad, una situación de acoso, salarios bajos, exceso de horas, dificultad de conciliación con la vida familiar, miedo a perder el empleo y situaciones de paro de larga situación. A raíz de la pandemia hemos desarrollado esta situación de miedo por la situación de alarma social.
Alfonso Hernández resalta un agravante de esta situación: el déficit de psicólogos y psiquiatras. Cuando se deriva a salud mental las citas se alargan hasta los cuatro o cinco meses, por lo que no hay un tratamiento ni seguimiento de la enfermedad y la baja se prolonga. Una situación que lleva consigo que este tipo de enfermedades no se pueden objetivar, y que llevan a las empresas a la desconfianza y a la sospecha.