La guerra en Ucrania ha modificado el perfil habitual de los refugiados con los que trabaja Cruz Roja en la Región
T04C203
REDACCIÓN
Mañana se conmemora el Día Mundial de las Personas Refugiadas, y la fecha llega en un momento en el que los desplazamientos están en máximos históricos. En España, las peticiones de asilo son un 82% más que en 2021; sólo en Murcia, Cruz Roja ha atendido en estos últimos doce meses a más de medio millar de refugiados, de los que la mayoría son mujeres ucranianas que han llegado a la región huyendo de la invasión rusa.
Ahora mismo, Cruz Roja ampara a unas 250 personas refugiadas en la Región. Priman, efectivamente, las procedentes de Ucrania, pero las hay de una treintena de nacionalidades diferentes, como nos explicaba en el programa Tarde Abierta Juan Antonio Balsalobre, que es el coordinador del programa que desarrolla esta ONG.
El impacto que la invasión rusa ha tenido en el volumen de población desplazada es innegable y ha modificado el perfil habitual de los refugiados con los que solía tratar Cruz Roja. Hasta ahora eran mayoritariamente hombres de mediana edad; ahora predominan las mujeres y hay porcentajes también apreciables de menores y de ancianos.
A todos ellos, Cruz Roja les ofrece una atención integral que incluye apoyo psicológico, cursos de idiomas para facilitar su integración y el asesoramiento de abogados en los casos en que están tramitando una solicitud de Protección Internacional. A estos últimos, también se les garantiza la cobertura de sus necesidades básicas durante un periodo de 18 meses, suficiente para que se resuelva su petición. Cada caso es especial y presenta sus propias particularidades, pero Juan Antonio Balsalobre reconoce que hay un tipo de refugiado que requiere de un apoyo muy especial: los ancianos.
