El presidente Fernando López Miras declina decir quién será el nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena y
El Gobierno murciano ya tiene decidido quién sustituirá a Yolanda Muñoz al frente del Puerto de Cartagena, si bien el presidente murciano, Fernando López Miras, ha declinado decir a los periodistas quién será y se ha limitado a manifestar que la decisión se tomará “pronto”.
En cualquier caso, no será, ha confirmado durante la inauguración de un nuevo centro de salud en la pedanía murciana de Algezares, en la reunión del Consejo de Gobierno de este jueves. "Como siempre se ha hecho", ha indicado, será el consejero de Fomento, José Ramón Díaz de Revenga, quien propondrá a la persona elegida al Estado, que es quien oficialmente hace el nombramiento de este cargo.
La presidencia del puerto está vacante desde el pasado viernes 27 de enero, cuando Muñoz anunció en un comunicado su decisión de dimitir, después de que se haya abierto una causa judicial en la que está investigada junto con otras ocho personas por supuestas irregularidades en la tramitación de contratos.
El Boletín Oficial del Estado todavía no ha publicado el cese de Yolanda Muñoz como presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena. Una vez se publique, el Gobierno regional tiene dos opciones: elegir a un nuevo responsable para dirigir el Puerto o dejar la plaza vacante. En este último caso, La Ley de Puertos del Estado indica que la representación institucional recaería en el vicepresidente de la institución, en la actualidad el empresario Pedro Pablo Hernández.
La Autoridad Portuaria vivió una situación similar en 2019 cuando Joaquín Segado abandonó la presidencia del Puerto para ir en las listas del PP a la Asamblea Regional. En aquel entonces, el Ejecutivo autonómico, administración competente para designar la presidencia del Puerto, decidió no nombrar sucesor para Segado. Durante 9 meses, hasta el nombramiento de Yolanda Muñoz, el empresario y expresidente de la patronal cartagenera Pedro Pablo Hernández, que en la actualidad sigue ostentando la vicepresidencia de la Autoridad Portuaria, asumió las funciones propias del presidente como la gestión de pago de nóminas o facturas, pero no decisiones importantes como inversiones o grandes contratos.
